La historia empezó hace más de 24 meses, cuando una integrante del refugio para animales Story County Animal Shelter, de Estados Unidos (Nevada), adoptó a Vincent, un gato que con pocos meses de edad tenía heridas muy graves en las patas traseras.
Tan graves eran que no podía caminar y esto tuvo a su dueña durante mucho tiempo tratando y pensando como hacer feliz a su gato brindándole nuevamente la movilidad que normalmente tiene un felino o, por lo menos, el movimiento necesario para andar y divertirse en casa.
Tras grandes esfuerzos, Vincent conservó la vida a pesar de las heridas graves pero, la sorpresa para Cindy Jones, la dueña de este gato, vino cuando gracias a investigaciones en la Universidad Estatal de Iowa, se logró colocar a Vincent patas de titanio, adaptadas a su tamaño para que pudiese moverse.
La adaptación toma su tiempo, sin embargo en las pruebas Vincent demuestra que si llegará a controlar sus nuevas prótesis de titanio y que como todo un Ciber-Cat se paseará con sus patas super fuertes. Lo más delicado en estos momentos son los tratamientos obligatorios y regulares a los que se ve sometido Vincent con varios medicamentos para evitar alguna infección mientras su organismo se adapta a los implantes.
¿Quieres conocer a Vincent?
Te invitamos a visitar el siguiente video, donde podrás verlo con sus implantes de titanio, paseándose en una de las muchas sesiones de estudio para analizar y mejorar su adaptación a las prótesis:
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